La Sociedad Radio Argentina, por boca de Enrique Telémaco Susini, efectúa en Buenos Aires la primera transmisión radiofónica realizada en el país, con la difusión de Parsifal de Ricardo Wagner.
Los primeros ensayos radiotelefónicos fueron hechos en el país en 1910, en la localidad de Bernal, por el propio Gugliermo Marconi. Este físico llegó a la Argentina en 1910 a bordo del barco Princesa Mafalda. Desde Bernal, con un cometa de 6 metros de superficie, remontó sus antenas a las alturas y se comunicó con Irlanda y Canadá. Las comunicaciones radiotelefónicas entre Italia y América del Sur se establecieron en 1930 desde el yate Electra de Marconi, fondeado en Génova. Pero ya hacía ya varios años que los aficionados argentinos practicaban transmisiones radiotelefónicas
A comienzos de 1916, el joven técnico ruso-norteamericano David Sarnoff sorprendió a sus jefes con la idea de una aplicación novedosa de ciertos descubrimientos de Hertz, Branly y Marconi: se trataba de llevar la música a los hogares mediante el empleo de la «inalámbrica», junto con conferencias, noticias generales, e informaciones sobre deportes.
El proyecto de Sarnoff – paralizado por la I Guerra Mundial – recién tuvo aplicación en 1920, prolongando el comienzo de una era que convertiría a la radiofonía en uno de los más poderosos instrumentos de comunicación social del mundo.
La aparición del fenómeno en la Argentina es prácticamente simultánea con Norteamérica. La noche del 26 de agosto de 1920 entre las 21 y las 23 Hs, en efecto, un grupo de aficionados integrado por Enrique Susini, Miguel Mujica, Cesar Guerrico y Luis Romero, instalaba un modestísimo equipo para transmitir la ópera «Parsifal» de Ricardo Wagner desde el Teatro Coliseo. Se trataba según algunos historiadores, de la primera transmisión radial del mundo con continuidad en el tiempo.
Un año más tarde L.O.R. Radio Argentina, primera licenciataria de la radiodifusión nacional, transmitía regularmente desde diversos teatros, e inclusive desde el propio Colon, con lo que se marcha un tono cultural. Hasta que llegó el 12 de octubre de 1922, día en que se realizó lo que podría denominarse la «primera cobertura periodística»: la asunción a la presidencia de Marcelo T. de Alvear.