Por Miguel Abálsamo
A pesar de los aciertos de Gastón Guarracino y Geronimo Venegas, el peronismo sigue cometiendo errores. Instituciones como el Consorcio, la UPC o la Subsecretaria de Trabajo, conducidos por peronistas no están a la altura de esos dos dirigentes. Sin embargo la vuelta a la intendencia en el 2011 no esta lejana. Los errores continuos de Molina acercan ese momento.
Que el peronismo de Necochea pueda volver al poder no es sorpresa, ante la inoperancia manifiesta, la falta de gestión demostrada y la incapacidad de conducción del intendente doctor Daniel Molina, no es extraño que en el 2011 pueda retornar a la intendencia local.
Los esfuerzos del doctor Gastón Guarracino, actual subsecretario de trabajo provincial, el dirigente con mejor imagen en el distrito y hoy por hoy el indiscutible candidato a la intendencia en la próxima elección, junto al fervor militante y la seria conducción del presidente del justicialismo, Geronimo Venegas, actual titular de las 62 Organizaciones y secretario general de un gremio ejemplar como UATRE, configuran la más importante, base piramidal del peronismo distrital.
Sin embargo los desaciertos siguen en el movimiento que fundo el general Perón. Instituciones como la Usina Popular Cooperativa, con un Consejo de Administración atornillado a sus sillones, sin renovaciones y cambios, atados a las estructuras de antaño, y con un presidente excesivamente individualista, donde prevalece el «..yo..» por sobre el conjunto y las medidas se toman verticalmente sin democracia interna del resto del Consejo de Administración, que son convidados de ´piedra a la hora de las decisiones, significan una defección para el plano general del peronismo. Porque la UPC esta identificada con el peronismo, y todo lo bueno, regular o malo que allí pase se traslada íntegramente extra muro.
Ese Consejo de Administración, donde el poder se reparte muchas veces más por sellos que por militancia o llegada a la sociedad, parece más un lugar para el «puestito» que el anhelo de desarrollar la cooperativa junto a la comunidad. El hecho irrisorio de que en una década subsista el sello de una lista Blanca inexistente para que algunos hagan negocios conservando puestos rentados importantes, más los puntos que equivalen dinero por reuniones en demasía que se suman al mes, es un verdadero desaguisado, que los ciudadanos de a pie no comprenden. La sociedad observa dirigentes cooperativistas ganando mucho por trabajo escaso.
La discriminación sufrida por varios integrantes de la prensa demuestra que la cooperativa además de no tener prensa (aunque estuvo a punto en silencio el señor presidente de la institución hace poco de colocar un secretario de prensa amigo, movimiento abortado por las líneas importantes de decisión del peronismo..) carece de creatividad y responsabilidad para entender lo que eso significa.
La UPC discrimina a la prensa en sus pautas publicitarias. Las manejan a su antojo, de acuerdo a la amistad del momento, en situaciones que muchas veces parecen inentendibles, creando un malestar en un amplio sector de la prensa, al sentirse relegados algunos y halagados otros, cuando la institución debería tener una objetividad al respecto, respetando a todos los hombres y mujeres del periodismo y no privilegiando el «amiguismo», o quien comparte la integridad de sus ideas, sin ejercer las críticas que merecen.
Otro punto peronista en este mapa es el Consorcio de Gestión. En época del ingeniero Norberto Jacok, colocado en la presidencia a través del peronista gobernador ingeniero Felipe Sola, también cometió errores.
El ingeniero Norberto Jakob, quien además de arribar al Consorcio de Gestión portuario se subió en ese momento al Frente para la Victoria, partido del presidente peronista Néstor Kirchner, intentó desde allí una candidatura a intendente, que rápidamente se vino abajo como castillos de arena cuando sube la marea. Puede haber mucha prensa paga, y Frente por la Victoria, pero cuando no hay uña de guitarrero mejor dejar la viola a otros.
Gastó 30.000 pesos mensuales de publicidad (la gestión actual gasta esa suma en todo el año), también discriminando las pautas publicitarias, entre periodistas amigos, y periodistas no amigos. Finalmente estalló todo, quedando la suma de 300.000 pesos en la cuenta del Consorcio tras su gestión, cuando hoy el ente portuario tiene una cuenta bancaria de siete millones de pesos.
La gestión del ingeniero Goicoechea pretende prensa sin prensa. Al igual que la UPC, no cuenta con interlocutores en esta profesión, nadie sabe con quien tratar, emitiendo comunicados de prensa que muchas veces llegan mal redactadas, no se sabe quien los envía. En fin…una improvisación. Las dos máximas instituciones del distrito, sin capacidad para definir el rol de la prensa y sin poder comunicacional.
Días atrás cometieron un serio error. En la voz de su agente de prensa actual, el periodista Marcelo Tomalino invitó a una conferencia de prensa a los periodistas «amigos», dejando a otros sin la convocatoria. Llamaron para la cobertura , y el representante de la prensa Marcelo Tomalino comunicaba la invitación a la conferencia en el Consorcio añadiendo..»Vengan…que en poco tiempo va a haber pautas publicitarias.». Una actitud poco ética, discriminatoria y casi extorsivo. Llamar a conferencia de prensa a «algunos», ofreciéndole pautas publicitarias futuras. Sin dudas no son actitudes serias de una institución de tamaña dimensión. Otro error peronista.
El desgraciado tema de otro obrero de la construcción fallecido, al no contar con las medidas de protección necesarias para su labor diaria, dejó al desnudo una actitud indolente de la UOCRA (Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina),y las quejas llegaron por este tema y otros más a la subsecretaría de trabajo local, a cargo del señor José Saladino, cuestionado en varios sectores obreros de nuestra comunidad, por no estar en muchos casos a la altura del alto cargo que ostenta.
El Consorcio con sus errores, a veces viviendo en un iceberg, sin dar la cara ante la sociedad, la Usina Popular Cooperativa por aferrarse a los puestitos, a los cómodos sillones y la discriminación a la prensa, sumado a la subsecretaría de trabajo por no responder a la defensa de los trabajadores con la energía que se debe poner, son tres lunares que tiene el peronismo.
Quizás en el 2011, las presencias de figuras como el doctor Gastón Guarracino y Geronimo Venegas puedan disimular estos errores y de tantos dirigentes que no están a la altura de la exigencia popular, tal vez alcance igual para que el peronismo recupere la intendencia ante un intendente lleno de errores ,desgastado y sin posibilidades de revertir la situación, si vuelve a la intendencia será por aciertos de algunos, pero en la mochila seguirá cargando , el movimiento nacional justicialista, los desaciertos de tantos.
Quizás volver a la intendencia no este tan lejos.
Deberán recordar que por algo la perdieron.
Y deberán tener memoria para no repetir los errores…