La Cámara de Diputados dio hoy media sanción a la ley de Prepagas, cuyo texto surge de la unificación de dos proyectos, uno del fueguino Leonardo Gorbacz (Bloque SI-ARI TDF) y otro de la cordobesa Patricia Vaca Narvaja (FpV). «Este es un paso muy importante aunque la verdadera revolución sanitaria será el fortalecimiento y financiamiento de los hospitales públicos de todo el país», dijo el parlamentario.
Para elaborar su proyecto, Gorbacz recogió los elementos principales de una iniciativa realizado por Fabiana Ríos en el 2006 cuando era diputada nacional y los términos de un fallo reciente de la Corte Suprema de Justicia.
El texto aprobado hoy por los diputados estipula que las prepagas serán fiscalizadas por el Ministerio de Salud y Defensa del Consumidor, deberán cubrir el total del PMO (salvo las odontológicas, las de emergencia y las más chicas), los contratos deberán ser previamente aprobados por el Estado, los aumentos de las cuotas también deberán ser autorizados por la autoridad de aplicación (de acuerdo a cálculos de costos), no podrán rechazar afiliados por razones de edad o enfermedades preexistentes, los mayores de 65 años que lleven más de 10 años afiliados no podrán tener aumentos extras. Además, la iniciativa crea una Comisión de Concertación donde también se sentarán usuarios y prestadores, para estos últimos la ley prevé protecciones especiales: fija aranceles mínimos que las prepagas deben abonar y el control para que no existan moras.
«El parlamento está funcionando mucho mejor, sobre este proyecto hubo mucho lobby durante tanto tiempo que haber logrado este consenso mayoritario fortalece el poder político sobre el poder económico, que para eso estamos», opinó el fueguino.
Finalizada la votación Gorbacz se manifestó conforme y destacó que: «esta es una ley que la gente necesitaba y es un orgullo, como representante de Tierra del Fuego, haber sostenido una propuesta elaborada en su momento con Fabiana Ríos, que ahora será ley de todos los argentinos. Valoro el trabajo conjunto con Vaca Narvaja (Vicepresidente de la Cámara Baja) y con todos los bloques en la Comisión de Salud».
La iniciativa, que fue aprobada por 187 votos a favor y 1 en contra (que luego habría sido modificado), será ahora girada a la Cámara Alta donde de ser avalada por los senadores se convertirá en ley y llenará un vacío normativo de más de 20 años
