Con una misa frente al boliche de Villa Gesell en que fue atacado Fernando Báez Sosa y una marcha de familiares al Congreso de la Nación, recordarán al joven a un mes de su asesinato.
La ceremonia religiosa se realizará a las 19 frente al boliche Le Brique, donde un grupo de rugbiers golpeó a Fernando hasta provocarle la muerte el 18 de febrero pasado.
El obispo monseñor Gabriel Mestre, titular de la diócesis de Mar del Plata, será el encargado de llevar adelante la misa.
El objetivo de la homilía, organizada en conjunto con el párroco de Villa Gesell, Pablo Bosisio, será pedir “por el eterno descanso” de Fernando Báez Sosa, por “el consuelo” para sus padres y familiares, y sumarse al “reclamo de justicia” por el homicidio.
Una hora antes, frente al Congreso de la Nación, la familia de Fernando reclamará justicia para el joven y pedirá el fin de la violencia.
Su madre, Graciela, pidió a la sociedad que la acompañe para sumar “fuerza para seguir luchando” y expresó su deseo de que asista mucha gente a la convocatoria.
“No hay religión, clase social, nacionalidad, raza o edad que la frene, por eso queremos decir basta de violencia, con energía y decisión, para que se escuche en cada rincón de la Argentina”, sostuvo la madre en declaraciones a radio Mitre.
Y pidió: “Que no haya nunca más otro Fernando, porque esto que le hicieron no se lo merece nadie, no se lo deseo a nadie, basta de tanta violencia, yo no voy a recuperar más a mi hijo, pero que se haga justicia y no exista otro más”.
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