En la cárcel de Batán estamos implementando un programa de prevención y solución de los conflictos de la comunidad penitenciaria basado en justicia restaurativa.
Lo que antes desembocaba en sanciones disciplinarias y registro en el legajo personal, ahora se gestiona tratando de remover las causas que originaron el problema, sistema al que los interesados se pueden someter en forma voluntaria.
Sometido al programa se impone alguna condición (no cometer nuevas faltas por un período, leer un libro o realizar alguna tarea en beneficio de la comunidad). Si se cumplen las condiciones la acción disciplinaria se extingue sin registro de ninguna índole.
Y ya estamos viendo los primeros frutos!!! Unos muchachos tuvieron que cosechar verduras y hortalizas y donarlas a un comedor comunitarios muy humilde. Aquí las pruebas.
Completa felicidad.
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