sábado, abril 20, 2024

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OPINIÓN: Dos que muestran gestión. ¿Será la polarización del 19?

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Por Gabriel De Vito

La gestión es la acción o trámites que se llevan a cabo para conseguir resolver una cosa.

A veces las gestiones prosperan, otras demoran y suele suceder que queden inconclusas a pesar de los intentos.

El año 19 el distrito de Necochea elije intendente y en la carrera, al menos en el presente, dos gestiones aparecen para mostrar ante la sociedad, la del intendente doctor Facundo López y el actual presidente del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén, con el resultado que el ciudadano mide ante cada realización.

El intendente (recibiendo encuestas que lo posicionan muy bien), va por su camino de reelección, dejando la incógnita de cuál será su agenda final cuando se definan tanto en provincia y Nación las estructuras, algo que ocurriría por febrero o marzo. En el medio la realización de las PASO, la posibilidad de desdoblamiento de elecciones bonaerense y nacional, donde la gobernadora María Eugenia Vidal estaría hoy ganando en cualquier escenario, más aún si va sola como candidata gobernadora a la reelección.

El presidente del Consorcio de Puerto Quequén viene afianzando solidez en la función, no sólo en el acto administrativo institucional portuario, sino bajando la realidad de puerto-ciudad, al hombre y mujer de todos los días.

La gestión tiene pro y contras. Es cierto

Lo que se realice bien da frutos, lo que no se puede o se hace mal va en deterioro de quien conduce la responsabilidad mayor en una empresa, club de barrio, o al frente de una línea política.

La polarización sigue vigente, entre Cambiemos (y quien resulte finalmente el candidato a intendente) con la figura del intendente que acapara un gran arco político en el distrito, con su sola presencia, aun sin «partido político definido» como lo aseveró él mismo días atrás cuando se reunió con la gobernadora de Buenos Aires jugando de local en el primer piso municipal.

Fuera de los anuncios y las promociones, «obras que nunca se hicieron en muchos años», suele aseverar Facundo López…» cambio y gestión…» suele definir Arturo Rojas, la gente va más allá, y comienza a polarizar, tal vez ni siquiera en partidos políticos o líneas ideológicas, sino en sus figuras.

En cualquier café mientras humeante se encuentran los mismos, en una charla de quincho esperando el asado, esquina entre dos amigos o en una cola bancaria, cuando se habla de política local se sentencia claramente… «la intendencia se juega entre Cambiemos y el intendente».

Por supuesto, faltando tan poco tiempo para una elección y a su vez tanto tiempo para esa elección, según con el cristal que se la observe, todo parece indicar es huella, la polarización, a la que parece no romperla nadie, y difícilmente pareciera pueda ocurrir.

La ventaja de Facundo López y Arturo Rojas sobre el resto es esa fortaleza, la gestión, la que los pone cada día ante el examen de la gente, mucho más aún al intendente que tiene doble responsabilidad y compromisos mayores a la institución portuaria. Cada día López debe tomar decisión, cada mañana que se levante, sabemos muy bien que las decisiones de un gobernante benefician y perjudica, lo que sí es importante saber que ambos suelen tomar decisiones sin pedirle demasiados consejos al miedo.

Tomando decisiones

En política siempre es bueno tomar decisiones antes de la duda constante.

Ambos, toman decisiones.

El intendente recupero rápidamente en su gestión la Playa de Camiones de Quequén que había sido privatizada , envió con convicción una batería de concesiones que han resultado exitosa, mantuvo un diálogo maduro con gobernación y Nación, amplía permanentemente con pluralidad  su equipo político donde convergen peronistas, radicales, provenientes del Pro e independientes, e incluso socialistas, es decir, no es alguien atado a círculos ideológicos impenetrables, tuvo oposición cuando la pavimentación de la avenida 10 y finalmente nadie le doblo la decisión, hoy es un escenario magnífico, lo mismo que la avenida 554 de Quequén, reparación de rotas calles históricas y a la espera de otras que deberá hacerla en el corto plazo, y cuando tuvo que mover cambios dentro de su esquema los hizo sin demasiado ruidos.

Detalle: a pesar de la crisis económica, a la que nadie escapa, ha pagado sueldos en tiempo y forma, adelantando aguinaldo cuando no había ocurrido desde tiempos del intendente Taraborelli en la década del ochenta.

A manera de síntesis, otro dirigente de su misma generación, Arturo Rojas tomó una decisión que no podemos dejar a un costado, en avenida 59 y diez cuando abrió todo ese lugar poblado de árboles (plantarán mil en pocos días), recibiendo allí el 13 de enero a los aerogeneradores que darán vida a los futuros molinos eólicos.

Parece algo sencillo, pero es una muestra, ante minorías que siempre se oponen a todo, que de una vez por todas debemos romper ese cerco de los «no» para avanzar junto a una sociedad que quiere desarrollo, emprendimientos e inversiones.

Algo los iguala, no suelen caer en lo tradicional y ya viejo de la política con esos acuerdos por sectores, a veces presionados por sumar de cualquier modo, esto parece no contar en el diario de cada uno, no queriendo decir que desconozcan el trabajo barrial e histórico, pero entienden que no pueden quedar aferrados a acuerdos clásicos.

Tanto López como Rojas tienen cada día agendas a desarrollar, el resto del arco político escasos argumentos para mostrar, porque no dirigen municipios ni instituciones importantes, por un lado, los deja en desventaja y por otro con la libertad de poder decir muchas cosas sin tener responsabilidades.

La gran duda existencial no es «polarización o no», sino como cerrarán las alianzas en pocos meses.

¿Tanto López como Rojas podrán ir en la boleta de la gobernadora Vidal?

¿Elecciones desdobladas o no?

¿Puede haber unas Paso gigante todos compitan?

¿El intendente buscará su reelección con un armado de Alternativa Federal con un peronismo moderado y moderno?

Son muchas las preguntas y todavía faltan respuestas.

Lo que sí parece incambiable es la polarización del 19 en Necochea ( el voto se dividirá en dos partes).

Al menos esto indica hoy la realidad.