Declaración de la Corriente Política de Izquierda.
El acuerdo del con el FMI profundiza el carácter reaccionario del Gobierno de Macri aliado con los gobernadores provinciales del PJ.
Este pacto representa una sangrienta transferencia de recursos y bienes económicos desde los trabajadores hacia los monopolios empresariales y bancarios nacionales e internacionales.
Lo que ocurre es una devaluación monetaria vía proceso inflacionario, paritarias salariales en cuotas y con techos del 15%, ahora flexibilizado al 20%, con reducción del gasto público en un marco de recesión inducida por las propias necesidades del capital. Todo ello implica medidas que agudizan los niveles de explotación de la fuerza de trabajo en un marco de depredación de la Naturaleza y exacerbación del consumismo.
Entramos así en una etapa donde la hambruna del pueblo se extenderá día a día. Se estima que el kilo de pan llegará a los 100 pesos en el corto plazo. La ofensiva crece cotidianamente: los medios de comunicación hegemónicos hablan de la «amenaza» de Paros, ocultando que se trata de un derecho constitucional. Las organizaciones sindicales son perseguidas y criminalizadas como ocurre con los “Metrodelegados”, a quienes pretenden despojar del descuento por planilla que los afiliados aportan libremente como aporte de cuota sindical.
En las últimas horas la Ministra de Seguridad acuso con total falsedad a los compañeros de la “Garganta Poderosa” de ser cómplices del narcotráfico, tratando de estigmatizar a los compañeros para su criminalización. El ajuste cierra con represión.
El hambre y la represión describen el panorama social que tendrá que atravesar nuestro pueblo en los próximos meses.
La Corriente Política de Izquierda reconoce que la gravedad de la situación debe acelerar el compromiso de las organizaciones populares para organizar la resistencia al Ajuste. Afirmamos la necesidad de orientar nuestras acciones a la organización y movilización autónoma de los trabajadores en el conjunto del territorio: Fabricas, Escuelas, Universidades y las diversas organizaciones populares.
La Unidad de los trabajadores se devela una vez más como la tarea estratégica para enfrentar al enemigo de clase en mejores condiciones.
En tal sentido nos parece de gran significación garantizar la mayor movilización posible el miércoles 13 de junio cuando se trate la Ley por la legalización del Aborto, seguro y gratuito; y el 14 de junio un masivo Paro de los trabajadores movilizándonos a Plaza de Mayo.
Hoy la ilusión de la salida electoral frente a la crisis se encuentra alejada de la dinámica social desatada por la crisis y se muestra aún más limitada para resolver los problemas de fondo que sufre nuestra sociedad.
La Corriente Política de Izquierda sostiene que hay que generar una resistencia al Ajuste ganando la calle y los espacios públicos, promoviendo el movimiento asambleario y participativo del conjunto de nuestro pueblo.
En este marco emerge con mayor urgencia la necesidad la construcción colectiva de un programa para la salida de la crisis desde los intereses populares.
-NO AL PAGO DE LA DEUDA EXTERNA y REPUDIO AL ACUERDO CON EL FMI
-REFORMA TRIBUTARIA QUE PAGUEN LOS RICOS. ELIMINACION DEL IVA PARA EL CONSUMO POPULAR.
-NACIONALIZACIÓN DE LA BANCA Y EL COMERCIO EXTERIOR.
-REFORMA AGRARIA INTEGRAL. LA TIERRA AL SERVICIO DE LAS NECESIDADES POPULARES Y NO DE LOS GRUPOS SOJEROS Y MINEROS.
-NO AL TARIFAZO. NACIONALIZACIÓN DE LAS EMPRESAS ENERGÉTICAS.
Son solo algunas de las propuestas que deben conformar parte de un debate conjunto, que intente poner en pie un nuevo Modelo Productivo una nueva Distribución de la Riqueza.
La CPI expresa estas convicciones con la firme voluntad se sumar a una construcción política amplia con bases de Poder Popular.
