jueves, abril 25, 2024

Internacionales

EL MUNDO: Pérez Esquivel exige la libertad de Lula

Sharing is caring!

El premio Nobel de la Paz argentino Adolfo Pérez Esquivel pidió hoy la libertad de Luiz Inácio Lula da Silva, al hablar frente a la Superintendencia de la Policía Federal, en Curitiba, donde solicitó autorización para ver al expresidente brasileño.

«Estamos acá con el hermano Leonardo Boff, queremos a Lula libre para la reparación de esta injusticia», afirmó Pérez Esquivel.

El premio Nobel de la Paz de 1980 y amigo del papa Franciso llegó hoy poco después de las 10 horas (13 GMT) a la sede de la Policía Federal en la zona norte de Curitiba.

Allí se reunió con el superintendente regional de la Policía Federal a quien le manifestó su intención de visitar a Lula, arrestado desde el 7 de abril.

«Estas son decisiones de ellos (por las autoridades, NDR), me gustaría que me autoricen la entrada con Leonardo Boff, espero que (actúen) humanitariamente, con un sentido de justicia, que me permitan encontrar con Lula», agregó el activista argentino.

«Queremos llevarle a Lula la solidaridad de muchas partes del mundo, de Argentina, de Alemania, de Francia, de España», reseñó el reputado defensor de los derechos humanos que vestía camisa blanca.

«Esto es un problema mundial, tenemos que sacar de esa prisión a Lula, pero eso va a depender de la solidaridad internacional», observó Pérez Esquivel, de 86 años, quien en agosto de 1977, fue detenido en Buenos Aires, en plena dictadura militar.

Fue encarcelado y torturado, sin haberse hecho proceso judicial alguno en su contra, y fue puesto a disposición del Poder Ejecutivo, pero logró sobrevivir a una atroz reclusión que duró 14 meses.

El activista argentino estuvo acompañado en Curitiba por un grupo de abogados que explicaron que aún no había llegado el parecer de la Justicia Federal de Curitiba.

Hace dos semanas el juez Sergio Moro, el mentor de la causa Lava Jato y titular de la Decimotercera Sala Federal, ordenó que Lula no reciba ningún «privilegio» y sea tratado como los otros veinte internos de la Superintendencia.

Esta semana la jueza Carolina Lebbos, de la Decimosegunda Sala de Curitiba, rechazó el pedido de Pérez Esquivel para monitorear el predio.

Sin embargo, la jueza no se había manifestado hasta hoy a la mañana sobre una segunda solicitud de Esquivel, para ingresar en condición de «amigo» de Lula da Silva y no como observador.

El reglamento de la Policía establece que el exmandatario puede recibir los jueves a sus familiares y, eventualmente amigos.

El líder del Partido de los Trabajadores (PT) fue condenado a doce años y un mes de reclusión, sentencia confirmada esta semana por el Tribunal Regional Federal 4 de Porto Alegre, que rechazó las últimas apelaciones de la defensa.

La presidenta del PT, la senadora Gleisi Hoffmann, visitó esta semana a Lula junto con otros miembros de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara alta.

Hoffmann manifestó su «preocupación» ante el régimen de «aislamiento» que se le aplica a Lula en su celda de quince metros cuadrados.

La dirigente petista Hoffmann demandó que se autoricen más visitas a Lula a quien definió como un «preso político».

Lula es «la única persona que brilla en el gusto popular» y «el pueblo quiere a Lula como presidente», por lo tanto «ese es el motivo de la presencia del premio Nobel Pérez Esquivel», dijo el teólogo Boff, sentado junto al portón de la sede de la Policía. «Vivimos en un régimen de excepción, los jueces son cómplices de este golpe, que fue orquestado por el Pentágono (de Estados Unidos, NDR)», sostuvo Boff que prometió obsequiar una bufanda roja al líder encarcelado. (ANSA).