Por Horacio Castelli
Esta parece ser la constante entre los funcionarios de todos los niveles. Toman decisiones sin convocar a nadie y entre cuatro paredes, rodeados de los amigos que, habitualmente, no conocen del tema a analizar.
El gobierno nacional, decidió modificar los aumentos en las jubilaciones, terminar con las jubilaciones de las amas de casa y modificar la entrega de medicamentos a los jubilados.
No consulto, ni analizó con los especialistas de distintos sectores, que hubieran aportado distintas miradas sobre un mismo tema. No lo hicieron y las consecuencias las pagan los mayores, sin posibilidad de defensa alguna.
La gobernadora María Eugenia Vidal, decidió cerrar casinos y salas de juego sin realizar un estudio preliminar, analizar las consecuencias que esto tendría y si en realidad aportaría algo a la “lucha” contra la ludopatía.
No existe ningún estudio presentado, donde se pueda visualizar que las decisiones tuvieron un fundamento. Nadie, ni la propia gobernadora pueden explicar por qué cierra el Casino de Necochea y no una de las salas que existen en Mar del Plata en hoteles privados, si lo que se intenta es combatir el flagelo de la ludopatía.
La única excusa, es que esa sala de juegos da pérdida, pero sin embargo, los trabajadores serán trasladados a otras localidades con lo que significa el desarraigo en lo social, y un costo mayor en lo referido a lo económico. Tampoco cierra.
Por qué no consultó con los especialistas en el tema, no lo analizó profundamente con los sindicalistas y trabajadores que conocen la verdadera potencialidad de cada sala.
También se decidió entre cuatro paredes modificar planes y programas educativos en todos los niveles, cerrando Fines, bachilleres de adultos y fusionando cursos sin mayor análisis.
Y la pregunta se repite ¿Por qué? ¿Es que para el gobierno bonaerense la educación es un gasto y no una inversión?
Y en el ámbito local, la situación no es diferente a través de los años. Aunque ahora estamos en una situación histórica que puede modificar esta realidad.
Los inversores que ya han informado su decisión de llegar a Necochea, deben encontrar a una sociedad preparada para discutir, analizar y acordar los pasos a seguir para que estas propuestas sean positivas para el distrito.
No debemos enfrascarnos en discusiones estériles, ni las autoridades encerrarse entre cuatro paredes y decidir en voz baja el futuro.
Hay organizaciones, estamentos, entidades, partidos políticos y profesionales que pueden enriquecer todas las propuestas.
Además, debemos esperar de los actuales concejales que se pongan decididamente al frente de los proyectos y las propuestas para lograr una rica discusión en la casa del pueblo.
Hasta el momento, aunque muchos recién comenzarán a desarrollar su tarea a pleno a partir del primero de abril, no hemos podido conocer las intenciones de nuestros ediles en discutir y presentar proyectos que nos permitan visualizar un futuro promisorio para el distrito.
Pero sobre todo, debemos pedir a las autoridades en todos los niveles, que abran la sus mentes para que el resto de los ciudadanos puedan aportar lo suyo.
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