viernes, marzo 29, 2024

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LUDOPATÍA: El 80% de los jugadores compulsivos son adictos a las tragamonedas

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El estudio se basa en el territorio bonaerense pero, como las conductas son similares, se estima que se repite a lo largo del país. Según el informe, en ocho de cada diez casos los jugadores compulsivos son adictos a las diferentes variantes de las maquinitas (tragamonedas y ruleta electrónica).

De acuerdo con los datos del Instituto Provincial de Lotería y Casinos (IPLyC), sólo hay diez centros asistenciales en Buenos Aires, y los especialistas piden mayores recursos para tratar este tipo de adicciones. La consecuencia social de este estado de situación, en la provincia que gobierna María Eugenia Vidal, son miles de jugadores compulsivos.

Siempre según la información provista por el IPLyC, el programa de atención a los ludópatas lleva atendidas 7724 personas por cuestiones vinculadas al juego patológico. Esto es así a pesar de que existen pocos recintos de asistencia en toda la provincia, ubicados en Avellaneda, Bahía Blanca, La Plata, Mar del Plata, Morón, Necochea, Olavarría, Pergamino, Tandil y Vicente López.

Del informe se desprende que el 65% de las personas asistidas entre 2005 y 2017 llegaron por problemas con las máquinas tragamonedas (5022), cifra que asciende a más del 79% si se suman los adictos a la ruleta electrónica (1050) y al hipódromo electrónico (64). Es decir que ocho de cada diez ludópatas bonaerenses son adictos a las diferentes variantes de las maquinitas y no a los juegos bancados como la ruleta o las cartas.

Empleados, con deudas y “asistencia perfecta”

Por otra parte, el 90% de los jugadores compulsivos son empleados, el 5% jubilados y el 2% amas de casa. Siete de cada diez ludópatas tienen deudas y la mitad asiste diariamente a una sala de juego.

Débora Blanca, psicóloga especialista en ludopatía y autora del libro La adicción al juego, ¿no va más?, dijo que el programa de los centros asistenciales “funciona bien y es absolutamente necesario para muchos familiares (de adictos al juego), que si no tienen atención gratuita quedan muy complicados”, y que lo ideal es “propiciar lugares de tratamiento bien específicos” en lugar de hacer foco en centros asistenciales generales.

“Gracias si piden ayuda”

“El jugador compulsivo gracias si pide ayuda en un lugar específico de ludopatía, no va a ir nunca a un centro de adicciones en general porque no se identifica con el toxicómano”, ilustró en relación con la intención del gobierno de Vidal de derivar las consultas por ludopatía hacia los Centros de Prevención de Adicciones (CPA), que se encuentran más extendidos en la provincia y que dependen del Ministerio de Salud bonaerense.