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La información que alimentos que son destinados a los chicos que asisten a las escuelas de Necochea estaban en mal estado produjo una lógica y profunda preocupación entre los habitantes del distrito. Sobre todo entre los padres que envían a sus hijos creyendo en la responsabilidad de quienes tienen la obligación de cuidarlos.

Por suerte, las autoridades de las escuelas (directoras, secretarias, docentes), fueron quienes descubrieron que alfajores y barras de cereal contenían moho y la leche que se les sirve a los alumnos es pura agua.

Dentro de las responsables de la contratación de la empresa proveedora de los alimentos se encuentra una directora de escuela como Mara Laxalt que siempre ha mostrado mucha contracción al trabajo y preocupación por ofrecerles a los alumnos de la Escuela 12 lo mejor.

Por tal motivo, deseamos pensar que ha habido un error, grave, pero error y no otra actitud con respecto a la contratación directa de una empresa de Lomas de Zamora que en nuestra ciudad tiene como responsable del depósito al hijo de la mencionada funcionaria y cuyo depósito ubicado en calle 51 – 2866 y la camioneta Ducato azul que se utiliza para el reparto de la mercadería no tienen habilitación municipal.

Sin embargo, la actitud de Ana Gauna y la propia Mara Laxalt de minimizar lo ocurrido dejan dudas sobre el accionar de ambas funcionarias del Partido Fe que ingresaron al Consejo a raíz de las últimas elecciones.

La realidad es que los alfajores y las barras de cereal tenían hongos; que las fechas de vencimiento estaban cercanas a expirar; que el líquido que se les sirve a los alumnos no es leche y que no hubo ningún tipo de control por parte del Consejo Escolar y si no fuera por la actitud de directores, docentes y personal auxiliar la situación sanitaria de los alumnos de Necochea habría sido preocupante.