Arrancó Rock in Río 2017 con la presentación de Maroon 5, ante la ausencia de Lady Gaga, y fue el plato fuerte de una jornada que contuvo a todos los géneros y dio lugar a que la modelo Gisele Bundchen haga un cover del «Imagine» de John Lennon.
Maroon 5 tuvo una noche plausible aunque insuficiente para ocupar el lugar dejado a último momento por Lady Gaga ante 100 mil personas venidas de todo Brasil y algunos países sudamericanos para ver a la reina del pop.
La banda californiana liderada por el vocalista Adan Levine empezó bien, con el público arriba, recibiendo calurosamente los tres primeros temas de la noche: «Move likes Jagger», «This Love» y «Sugar».
También hubo espacio para el clásico «Sunday Morning» y otros temas muy conocidos como «Payphone» y «Animals», todo con un pop correcto de Adam Levine, siempre contorneándose de pantalones y sudadera negras.
Levine jugó bastante para la platea femenina haciendo una apuesta a su bien ganada fama de galán del grupo, por lo que un crítico brasileño, del sitio G1, lo comparó hoy con el crack Cristiano Ronaldo cuando se mira en las pantallas gigantes del Real Madrid.
Fue aplaudida, aunque sin emoción, la versión de «Garota de Ipanema», el himno de la Bossa Nova, interpretado en un buen portugués por Levine que la reverenció como una «de las mejores canciones que jamás fueron escritas, y fue creada aquí».
Ya era la madrugada de este sábado cuando la banda se despidió con «She will be loved» y sin que Levine haya hecho ningún comentario sobre la ausencia de Lady Gaga, uno de los asuntos que dominó las redes sociales.
El viernes por la mañana se había informado en Brasil que la cantante se vio obligada a desistir del viaje a Rio por los fuertes dolores causados por la fibromialgia que padece desde hace algunos años.
«La enfermedad que sufro y de la que hablo en mi documental es fibromialgia», contó la estrella de 31 años a sus seguidores sudamericanos que el viernes no ocultaron sus frustración ante la ausencia.
En la madrugada de hoy miles de seguidores de Lady se retiraron del recital de Maroon 5 con algo de «saudades».
Este sábado el diario Folha de San Pablo, algo sarcástico, escribió que reemplazar a Lady Gaga con Maroon 5 es parecido a decirle a un comensal que el banquete al que estaba invitado fue suspendido y se le obsequia un ticket par ir a un faast food.
El público había comenzado a ingresar a las 14 horas cariocas (17 GMT) bajo un sol de 38 grados en el complejo construido en la zona oeste de la Ciudad Maravillosa.
Se vieron banderas del arco iris celebrando la diversidad sexual y varias veces el público coreó «Fuera Temer» contra el presidente, que había recibido igual repulsa el año pasado en Río, al abrir los Juegos Olímpicos.
Desde cerca de las 17 horas comenzaron los shows de bandas locales de todos los gustos: de rap, a funk y axé.
En el palco central, reservado para superstars, sobresalió Pet Shop Boys, con un electro pop atildado y británico, bien guiado por el veterano vocalista Neil Tennant.
Como siempre la marca de este inmenso parque temático que es Rock in Rio fue la diversidad o si se quiere el eclecticismo. Mientras en el Palco Mundo se presentaban las estrellas globales que llegan en sus jets privados, en el escenario Sunset hubo un genuino homenaje a los próceres de la música popular brasileña al celebrarse los 100 años del samba.
La modelo Gisele Bundchen pasó raudamente por el escenario central. La esbelta Gisele compartió el escenario con la popularísima Ivete Sangalo, que ha vendido millones de discos y aparecido en tantísimas publicidades de casas de electrodomésticos a teléfonos celulares.
Gisele e Ivete, que anunció estar embarazada de mellizos, se emocionaron al pedir por un mundo sin odio y con amor para todos, antes de cantar a medias el «Imagine» de John Lennon. (ANSA).
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