Dos jóvenes murieron en una jornada tensa de marchas de protestas y de concentraciones oficialistas, un estudiante universitario en Caracas y una muchacha en Táchira, ambos baleados.
Un joven, identificado como Carlos José Moreno, de 17 años, perdió la vida tras ser baleado en la cabeza por presuntos miembros de los grupos armados en San Bernardino, uno de los puntos de concentración de la marcha opositora que pretendía llegar a la Defensoría del Pueblo, en Caracas.
En tanto, un segundo homicidio se registró en las manifestaciones que se realizaban en Táchira, cerca de la frontera con Colombia. Se trata de una mujer de 23 años de edad identificada como Paola Andreina Ramírez Gómez.
La muchacha fue asesinada por un impacto de bala en la cabeza durante una concentración en la plaza San Carlos de San Cristóbal, estado Táchira, según testimonios de testigos y familiares de la víctima reproducidos por la prensa local.
El fallecimiento del joven en Caracas lo confirmó la madre de Moreno, quien dijo a los periodistas que su hijo era estudiante de Economía de la Universidad Central de Venezuela, y que «no estaba involucrado en la protesta».
«Sólo pasaba por el lugar en el momento de los disparos», contó la mujer. La bala lo alcanzó en la parte frontal de la cabeza, indicaron los médicos que lo asistieron.
La víctima «estaba en un punto de concentración de la oposición para marchar y recibió un tiro por parte de uno de los motorizados que antes lanzaron unas bombas lacrimógenas a la concentración», declaró el presidente del Hospital Clínicas Caracas, Amadeo Leiva.
La bala «le dio en el cerebro», remarcó y detalló que el joven ingresó al hospital «con signos vitales, pasó a pabellón, pero esas heridas de bala tienen alta estadística de mortalidad».
La prensa local narró que hay dos versiones sobre el hecho que acabó con la vida del joven estudiantes.
Una señala que a la víctima le dispararon desde un techo y otra apunta que fue herido por un motorizado, miembro de un grupo no identificado.
La coalición opositora convocó hoy a sus seguidores a una «gran toma» de Caracas desde 26 puntos de la capital para confluir en la sede de la Defensoría del Pueblo, a la que han tratado de marchar en al menos cinco oportunidades este mes pero siempre fueron bloqueados por los cuerpos de seguridad.
El presidente Nicolás Maduro acusó el martes a sus adversarios de promover un golpe de Estado y señaló a Estados Unidos de tratar de «asaltar el poder político en Venezuela».
Con el fallecimiento de estas dos personas suman siete los muertos en tres semanas de protestas con las que la oposición exige elecciones generales para sacar del poder al presidente Nicolás Maduro, a quien acusan de hundir al país en una severa crisis económica y política.
El oficialismo en tanto sostiene que las acciones son «un golpe de Estado», impulsado por la derecha y con «intervencionismo internacional», especialmente de Estados Unidos, según frases del propio Maduro.
En la tensa jornada de este miércoles donde opositores pero también oficialistas salieron a manifestar a las calles, los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y manifestantes que les tiraban piedras y cócteles molotov estallaron en reiterados lugares.
Especialmente en una estratégica autopista de la capital y en varios sectores del oeste de Caracas. Dirigentes opositores hablaron de «numerosos heridos» y de grupos de choque que actuaron con «ferocidad». (ANSA).
Noticias relacionadas
Qué dicen de esta represión los kirchneristas y los zurdos?