Es por la suba que impulsa el ministerio de Transporte, que va del 120 al 400 por ciento. Afirman que no tiene en cuenta a quienes se desplazan a diario para trabajar en la Capital desde Provincia.
Los exorbitantes aumentos de la tarifa de los peajes de los ingresos a la Capital Federal, que pasarían en el caso de un automóvil de 25 a 55 pesos y en el caso de una moto de 10 a 25 pesos, calaron hondo en la Legislatura bonaerense, desde donde pidieron tomar en consideración a los miles de ciudadanos que se desplazan para trabajar en la Ciudad Autónoma a diario.
El presidente de la Comisión de Transporte de la Cámara de Senadores bonaerense, Alejandro Urdampilleta, se refirió al tema y calificó de «desproporcionado y exorbitante” el aumento de tarifas a los peajes que planea implementar el gobierno nacional en los accesos a la capital y aseguró que “perjudicará a miles de bonaerenses que se trasladan para trabajar”.
“El gobierno habla de bajar la inflación durante este año y es el mismo estado el que la incrementa con aumentos en los peajes y en los combustibles que inevitablemente impactarán en los precios de los productos que se transporten”, graficó el legislador del Bloque Peronista.
Urdampilleta precisó que el aumento de peajes en los ingresos a la Capital “no tiene en cuenta a la gran cantidad de familias que se desplazan a diario desde la provincia por cuestiones laborales, lo que significa otro duro golpe al bolsillo de los trabajadores”.
Sostuvo también que el nuevo esquema que plantean los gobiernos nacional y porteño “sólo se focalizan en aumentar las tarifas de los peajes en lugar de implementar un sistema de transporte público eficiente y seguro para que la gente no use las autopistas”.
“El peaje aumenta un cien por ciento en las horas en que la gente concurre a su trabajo y no existe manera alguna de desalentar el ingreso y egreso de vehículos a la capital si no existe un transporte alternativo. La medida es totalmente ilógica y arbitraria”, concluyó.